test d' ADN


LA PRUEBA DEL
ADN
(¡La ciencia al servicio de la verdad!)
y
LA ASOCIACIÓN



 test d' ADN




No podía ser mejor tratado por el Ministerio de Defensa. Fue de manera fortuita como descubrí que un fragmento de epidermis expuesto en los Inválidos es presentado como perteneciente al exhumado de 1840. Para verificarlo, acudo a los Inválidos en el otoño del 2000 y descubro en efecto esta pieza que figura en la vitrina consagrada al Retorno de las Cenizas, en la sala Bugeaud.

Bajo la referencia 05673, consta de la leyenda siguiente:

  «Pedazo de epidermis desprendido del rostro del Emperador».

epiderme



El 30 de abril del 2001, el Teniente Coronel Chaduc consiente en informarme (habrá hecho falta para esto pasar por el despacho del ministro): «El pedazo de epidermis del rostro de Napoleón Iero fue tomado por el doctor Guillard durante la exhumación del Emperador en 1840. Más tarde, el Emperador Napoléon III lo donó a su escudero Firmin Rainbeaux.


Napoléon III
Napoleón III


Un descendiente de éste, Félix Rainbeaux lo otorgó al museo de la Armada en 1936 (7).»



Así pues, su autenticidad no deja duda. Ulteriormente, me enteré a través de una carta de Letitia de Witt (la hija del conde), secretaria de conservación del departamento 1789-1871, que la escritura del doctor Guillard «parece ser la que se halla al dorso del medallón que contiene la reliquia.» Esto en comparación con otras etiquetas escritas de puño y letra de este mismo doctor y relativas a los fragmentos de soldadura del féretro de hojalata y un fragmento del féretro externo de caoba (8).

Cuando descubro esta reliquia, me parece que poseemos ahí la pieza última
que permitirá –según los propios términos de Jean Tulard- dar fin a las polémicas. Puesto que parece imposible obtener la abertura del sarcófago de porfirio, tenemos la fortuna de poder acceder a un resto corporal del exhumado que permitirá realizar análisis de ADN. De este modo, los debates inútiles llegarán a su fin; bastará con hallar descendientes de la familia Bonaparte que autoriczn una simple toma de saliva para permitir la comparación de los ADN.

¿Podía acaso esperarse más ?

 La prueba de ADN, sin que se abriese el sarcófago! Sin duda, el pedazo de epidermis en cuestión no es muy importante.

 ¿ Es acaso susceptible de ser analizado, dada la poca substancia que ofrece ?

 LEl profesor Cassiman, en un mensaje dirigido a Philippe Delorme lo piensa:

«He analizado la foto. Si fuera una muestra fresca, no habría problema. Dada su edad, dependerá del tratamiento del que haya sido objeto este pedazo (manipulaciones por X personas).
Lo que más me preocupa es que podría no haber suficiente ADN para hacer más de una prueba (confirmación). En todo caso, solo será después de haber tratado cuando sabremos más del asunto (…). »


No se trata –repitámoslo – más que de comparar el ADN mitocondrial; este es menos complejo que el ADN nucléico y se conserva mejor. Agreguemos que concierne a los expertos en genética pronunciarse sobre la factibilidad de la prueba.


¡Comparemos, pues! ¿Sí, pero con quién? Philippe Delorme, el historiador célebre quien ha resuelto el caso del corazón de Luis XVII, se interesa en nuestro enigma: es cierto que presenta un evidente parentesco; ¡Un personaje histórico eminente (y en lo que concierne a Napoleón, es un eufemismo), y un enigma lleno de giros y repercuciones! Por medio de él, obtengo la lista de decendientes en línea femenina de la princesa Carolina Murat quien fue Reina de Nápoles.

En efecto, es imperativo obtener ADN mitocondrial fresco y que corresponda al que perteneciera a Napoleón. El ADN mitocondrial no se transmite más que por las mujeres, aún si los hombres son también portadores: es solo que, siempre es el de su madre. Napoleón y Carolina tienen un autor común indiscutible: Laetitia Bonaparte, la Señora-Madre, personaje digno de la antigüedad quien dará a luz a un emperador, tres reyes, un príncipe, una reina y dos princesas…

En teoría, pues, todas las descendientes en línea femenina de Carolina deben poseer el mismo ADN mitocondrial que el de Napoleón. Estas marquesas o condesas viven en Italia. En interés de la ciencia y de la historia, estas últimas no deberían negarse. Por medio de una periodista italiana, hago que se contacte a una de ellas de quien –por discreción- callaré el nobre. La respuesta cae como una cuchilla: es un sí, pero a condición de que el ADN mitocondrial sea identificado a partir de la epidermis del museo de la Armada! Es bastante lógico, y no gozo de aura particular ninguna, ni de un renombre suficiente para esperar agradecimientos por una tal petición !


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ASOCIACIÓN


JEstoy decidido a constituir una asociación cuyo objeto exclusivo es obtener el peritaje de las Cenizas conservadas en el sarcófago de porfirio de los Inválidos.

Pido pues a todos aquellos que comparten mi deseo de conocer la Verdad, de pre-inscribirse dirigiéndome un mensaje por correo electrónico a la dirección siguiente:





No acepto pseudónimos y ruego a los impetrantes darme a conocer su dirección y fecha de nacimiento.

Gracias!
Bruno Roy-Henry







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